Es correcto afirmar que un empate
no es un buen resultado para ningún equipo, sin embargo, considerando el
momento que vive Barcelona, tratando de recuperar el nivel que lo hizo campeón en el 2012, el
empate ante Emelec en el Capwell es bueno para el estado anímico de los
jugadores y así tratar de subir en la
tabla de posiciones. Para el equipo eléctrico, el empate en casa, es sinónimo
de derrota.
Mucho se hablaba de los momentos diferentes que viven estos 2 equipos y muchos afirmaban un
resultado favorable para Emelec, inclusive con goleada por ser el puntero del
campeonato nacional, sin embargo, una vez más se demuestra que un clásico es un
partido aparte.
En esta ocasión, con el empate
por 0 – 0, Barcelona sumó su sexto partido sin perder en el Capwell y el partido
11 sin perder de forma consecutiva, incrementando la estadística que comenzó en junio del 2010.
Esto definitivamente motiva a los jugadores amarillos para recobrar su
identidad y hacer mejores presentaciones en lo que resta de la primera etapa.
En este momento, todos los
esfuerzos de Barcelona deben centrarse en quedar en buena posición en esta
primera etapa, para tener un panorama favorable en la tabla acumulada y tener
en mente el objetivo principal, que será ganar la segunda etapa y así disputar
la final.
¿Qué pasó con Emelec?
El buen nivel de Emelec se ha
centrado hasta ahora por las bandas, ya que el renombrado refuerzo Pablo
Zeballos no ha podido demostrar toda su categoría. El problema es que el diseño
actual del equipo eléctrico, no se acopla claramente a las características de
este jugador y por esto, se lo ve deslucido en la cancha.
Esto es un problema para Gustavo
Quinteros, porque tiene la presión de alinearlo, debido al alto costo de los valores
que percibe mensualmente y por la necesidad de tener una variante en el estilo
de juego, al jugar también por el centro de la cancha.
En cada partido Gustavo Quinteros
tiene que decidir, por mantener el esquema por las bandas que hasta ahora le
han dado resultados o cambiar el estilo y someterse a tener malos partidos
hasta que el equipo se acople.
En el clásico del astillero, los
jugadores de Barcelona hicieron movimientos inteligentes y lograron tapar las
bandas del equipo eléctrico. En los primeros minutos Marcos Caicedo hizo el
juego que lo ha convertido en la revelación del 2013, pero poco a poco sus
desbordes fueron controlados.
Haciendo movimientos tácticos en
la bandas, bien encomendados por Gustavo Costas, se logró controlar a este excelente
equipo, que hasta ahora había sido arrollador jugando como local. A esto se le
debe sumar, que Emelec le dio ventaja a
Barcelona, al no sustituir al juvenil en cancha Carlos Enrique Vera y hacer el
cambio obligado por Enner Valencia en los primeros minutos del segundo tiempo.
Este cambio pudo haber tenido mayor incidencia en el partido, ya que el juvenil
cumple bien en la labor defensiva, pero pocas veces se proyecta al ataque, como
debe ser un marcador en el fútbol actual. En los primeros partidos se pensó que
Vera era el juvenil ideal, pero poco a poco se está convirtiendo en otro Oscar
Bagui, quedándose replegado en el fondo.
De seguir en esta línea, los demás equipos
encontraran el lado débil de Emelec por este sector, como ya lo hizo Deportivo
Quito en la capital, y el primer lugar de la tabla de posiciones podría verse
afectado, ya que Liga de Quito está mejorando en cada partido y podría
alcanzarlo.
¿Qué nos dejó la intensidad de juego del clásico?
Emelec venía en una racha impresionante
ganando todos sus partidos de forma consecutiva, pero en las últimas fechas,
perdió el invicto ante Deportivo Quito por
3 a 0 y ahora pierde 2 puntos como local al empatar con Barcelona, en un
partido de mucha intensidad. Los rivales se le están acercando en cada fecha,
pero todavía cuenta con la ventaja de tener un partido pendiente como local
ante independiente del Valle.
Luego del clásico, el trabajo
de recuperación en los 2 equipos debe ser tratado con bastante
responsabilidad y la situación ahora para los 2 técnicos del astillero, será
enfrentar con excelente nivel los partidos del domingo 28 de abril, en el que Barcelona
jugará con Liga de Quito en el monumental y Emelec visitará a
Independiente del Valle en el estadio Rumiñahui de Sangolquí.
Redacción Gustavo Álvarez Tagle –
(Twitter: @gustavoalvarezt)
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